Simulación de simulación, 2016

En abril de 2016, realizando una ascensión en la ladera de la Maladeta para fotografiar el perfil de la divisoria con Francia, el artista localizó en esa cresta situada en la vertiente opuesta del valle, situada frente al glaciar, cinco enclaves situados en una misma cota, localizados entre la Tuca de Salvaguardia y la Tuca de Bargas, que parecían mantener una cierta equidistancia con el glaciar.

Se puede llevar a cabo un recorrido encontrando puntos de observación equidistantes del glaciar, manteniendo una misma cota de 2530 metros de altitud para obtener, en una secuencia de cinco imágenes, el efecto engañoso de una rotación virtual del glaciar sobre un plano horizontal, una simulación de las simulaciones 3D; con esta acción el artista lleva a cabo el recorrido físico de una imagen mental inspirada en las técnicas de generación de realidades virtuales.

Para ubicar la cámara en esos cinco puntos, distantes entre sí y separados por accidentes geográficos, pero relativamente equidistantes del glaciar situado a unos 5 kilómetros de distancia, es necesario ascender a los enclaves elegidos en días sucesivos, pues el tiempo empleado en los itinerarios, la luz buscada y las condiciones atmosféricas existentes impiden hacer más de una fotografía por día: las cinco imágenes que componen esta serie representan la fantasía mental de una rotación virtual confrontada al insoslayable dominio de lo físico.